El estudio confirma algo que hasta ahora se creía impensable y que ha sido motivo de debate durante 25 años. Que el astro rey tiene la suficiente masa como para explosionar en un festival de luces y colores que engullirá la Tierra a su paso. Y es que no todas las estrellas tienen lo que hay que tener para convertirse en una nebulosa planetaria.
"Cuando una estrella muere, expulsa una nube de polvo y de gas llamada 'envoltorio' al espacio. Ese envoltorio puede llegar a tener hasta la mitad de la masa de esa estrella. [El envoltorio] deja al descubierto el núcleo, que para entonces se habrá quedado sin combustible y, tras ello, se habrá apagado y muerto", explica Albert Zijlstra, profesor de la Universidad de Manchester y uno de los autores del estudio.
Durante los próximos miles de años, nuestra estrella se preparará para explotar: se hará un 10% más brillante, un porcentaje suficientemente alto como para secar los océanos del planeta y, por tanto, para acabar con todo resquicio de vida, por lo que no estaremos presentes para presenciar uno de los fenómenos astronómicos más bonitos del espacio.
These Hubble images compare two diverse views of the roiling heart of a vast stellar nursery, known as the Lagoon Nebula. The images, one taken in visible and the other in infrared light, celebrate Hubble’s 28th anniversary in space: https://t.co/UwC20K0c6R pic.twitter.com/IblF6ZbGx3
— Hubble (@NASAHubble) April 19, 2018
Esto te puede interesar: La NASA capta impactantes imágenes de la nebulosa del Cangrejo (vídeo)