"Los procesos en nuestro país han alcanzado un límite peligroso, que puede acarrear consecuencias irreversibles", alertó Sarkisián en una declaración publicada en la web de la Presidencia.
El mandatario, que tomó posesión este abril, lamentó que el encuentro entre su predecesor en el cargo y hoy primer ministro, Serzh Sargsián, y el diputado parlamentario Nikol Pashinián, líder de la oposición que exige la renuncia de aquel, terminara sin resultado.
"Contrariamente al acuerdo logrado la víspera, se suspendió la negociación que habría podido distender la situación", constató el presidente.
El encuentro entre el primer ministro y el líder de las protestas antigubernamentales que se suceden en Ereván desde el 13 de abril duró apenas tres minutos: Sargsián se negó a dialogar en presencia de periodistas y acusó de chantaje a Pashinián, dispuesto a conversar únicamente sobre las condiciones de una transición no violenta.
Más tarde, Pashinián y dos diputados más, Ararat Mirzoyán y Sasún Mikaelián, fueron detenidos durante un mitin no consensuado con las autoridades.
Las fuerzas de seguridad usaron granadas aturdidoras y otros medios antidisturbios para dispersar una marcha de la oposición en el barrio de Erebuni.
Serzh Sargsián fue titular de Defensa de 2000 a 2007, ocupó el cargo de primer ministro por un período de doce meses entre 2007 y 2008, y ejerció como presidente de Armenia durante diez años, hasta que fue relevado por Armén Sarkisián el 9 de abril.
Su candidatura, propuesta por la coalición gobernante para encabezar el nuevo Gabinete, fue aprobada en el Parlamento el 17 de abril, al calor de las protestas de la oposición que anunció el comienzo de "una revolución de terciopelo" en Armenia para forzar la dimisión de Sargsián, a quien responsabiliza del deterioro de la situación económica en el país.