"Debido al derrubio de la línea divisoria entre las armas convencionales y las nucleares baja el umbral del (probable) uso por Rusia del arma nuclear, la desaparición de tal línea entre la paz, la crisis y la guerra tiene un carácter desestabilizador y entraña peligro", declaró.
También anunció que la OTAN saluda la implementación del START (Tratado de Reducción de Armas Estratégicas) y abogará por implementar el Tratado INF" (sobre misiles de alcance medio y más Corto).
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El presidente Putin en su reciente mensaje al Parlamento reveló que Rusia dispone de nuevo armamento, dijo que las fuerzas estratégicas nucleares incluyeron en sus arsenales 80 misiles balísticos intercontinentales, 102 cohetes balísticos de submarinos y tres submarinos estratégicos Boréi.
También refirió que Rusia empezó a desarrollar armas estratégicas que no siguen trayectoria balística, motivo por el cual son inmunes a los sistemas de defensa antimisiles.
Moscú y Washington suscribieron en 2010 el Tratado START III en sustitución de dos acuerdos anteriores, de 1991 y de 2002.
El 5 de febrero de 2018 se cumplió el plazo tope en que Rusia y EEUU debían alcanzar los indicadores acordados por el STRAT III, la vigencia del propio tratado expira en 2021.
El Tratado INF sobre misiles de alcance medio y más corto, firmado entre Washington y Moscú en 1987, no tiene fecha de caducidad y prohíbe a las partes disponer de misiles balísticos terrestres o misiles de crucero con un radio de acción entre los 500 y los 5.500 kilómetros.
Rusia y EEUU se han acusado en varias ocasiones de desarrollar sistemas que violan este pacto.