"No vinculamos los aranceles y las negociaciones del TLCAN, pero estamos felices de seguir avanzando" en las conversaciones, dijo Trudeau al medio local CNBC.
Trump ordenó la semana pasada imponer en un plazo de 15 días aranceles de 25% a las importaciones de acero y de 10% a las de aluminio, pero exceptuó a Canadá y México, condicionando su inclusión al resultado de las negociaciones del TLCAN.
El primer ministro canadiense también dijo que las exenciones de Estados Unidos no eran un "favor milagroso".
En un comunicado emitido más temprano Trudeau dijo que buscaría la opinión y el consejo de los trabajadores del sector siderúrgico y del aluminio sobre cómo enfrentar el exceso de capacidad de producción en los mercados norteamericano y global.


