Según el rotativo, ninguno de los 23 analistas del Centro de Interacción Global cuya misión era luchar contra la "campaña de desinformación de Moscú" habla el ruso.
El periódico estima que este es uno de los "síntomas" de la respuesta pasiva del presidente Donald Trump respecto a la "injerencia de Rusia".
La primera mitad de esta suma fue reservada durante la administración de Barack Obama para "enfrentar la propaganda antidemocrática de Rusia y China", señala The New York Times.
Moscú niega rotundamente cualquier interferencia en las elecciones estadounidenses.
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, calificó esas acusaciones de "totalmente infundadas".
Además: Trump acusa a Obama de no luchar contra la supuesta "injerencia" rusa en las elecciones