"La restricción a las importaciones anunciada por el presidente estadounidense puede afectar no solo a otras economías, sino también a los propios Estados Unidos", indica el comunicado.
"Llamamos a Estados Unidos y a sus socios comerciales a trabajar constructivamente para reducir las barreras comerciales y zanjar las discrepancias comerciales sin recurrir a medidas tan extraordinarias", agrega la nota.
El FMI dice estar preocupado porque las medidas de EEUU obliguen a los países guiados por sus intereses nacionales a ampliar las restricciones a la importación.
La semana pasada, el Departamento de Comercio había recomendado al mandatario gravar todas las importaciones de acero con un tributo del 24%, o imponer un arancel del 53% a los suministros procedentes de 12 países.
La cartera explicó que el exceso de capacidad mundial de acero es de 700 millones de toneladas, casi siete veces el consumo anual de ese metal en EEUU.
Hasta el 15 de febrero, EEUU había presentado 169 quejas antidumping (comercio desleal) y compensatorias sobre el acero, de las cuales 29 fueron contra China.