Se instalarán laboratorios móviles en las inmediaciones del estadio en el que se celebrarán los partidos, el Samara Arena, y en la plaza Kuibíshev, en el centro de la ciudad. De esta forma se espera analizar y controlar la calidad del aire a partir de mayo y hasta finales de julio. Durante los días en los que se celebrará la competición se analizará su composición seis veces cada 24 horas. Dos, los días en los que no haya partido.
Al igual que en otras ciudades rusas durante el Mundial, en Samara se limitará la venta de alcohol y se prohibirá la circulación de armas. Por ejemplo, los puestos de comida no podrán vender alcohol en recipientes de vidrio y se prohibirá su venta completamente en lugares de gran afluencia.
El campeonato de fútbol más prestigioso del planeta se celebrará entre el 14 de junio y el 15 de julio de 2018 en 11 ciudades del país eslavo, entre las que destacan, además de Samara, Moscú, Kaliningrado, San Petersburgo, Volgogrado, Rostov del Don y Saransk.