La mayoría de estos vehículos aéreos no tripulados, 34, fueron derribados en la región de Volgogrado; cuatro, en la de Kursk; otros cuatro, en la de Rostov; y uno, en la de Bélgorod, precisó el ente militar.
Rusia continúa desde el 24 de febrero de 2022 una operación militar especial en Ucrania, cuyos objetivos son proteger a la población de un genocidio por parte de Kiev y atajar los riesgos de seguridad nacional que representa el avance de la OTAN hacia el este.
Las provincias rusas limítrofes con Ucrania, como Bélgorod, Briansk, Kursk y Vorónezh, denuncian regularmente impactos de proyectiles, incursiones de drones y otros ataques desde el otro lado de la frontera, que obligan a la población a buscar refugio en otros lugares.