"En la jornada pasada, las bajas del Ejército ucraniano en la línea de operaciones de Kursk sobrepasaron los 250 militares. Además, los ataques de las fuerzas rusas destruyeron un vehículo de combate blindado, una pieza de artillería, un mortero y tres automóviles. Siete soldados ucranianos se rindieron", dice el parte diario del Ministerio de Defensa.
En total, en los combates en la línea de operaciones de Kursk, Kiev perdió ya más de 29.100 efectivos, 180 tanques, 101 vehículos de combate de infantería, 106 vehículos de transporte blindados, 1.063 vehículos de combate blindados, 780 automóviles, 255 piezas de artillería, 40 lanzaderas múltiples —incluidos 11 Himars estadounidense— 10 lanzaderas de sistemas antiaéreos, 7 vehículos cargadores de proyectiles, 58 estaciones de guerra electrónica, 12 radares contrabatería, 4 radares para defensa aérea, 25 equipos de ingeniería y otros, así como un vehículo de desminado UR-77, cinco vehículos de reparación y evacuación y uno de Estado Mayor y mando.
"La operación para eliminar las tropas del Ejército ucraniano continúa", agregaron en el Ministerio de Defensa ruso.
Rusia continúa desde el 24 de febrero de 2022 la operación militar especial con el objetivo de defender las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, previamente reconocidas por Moscú como Estados soberanos, frente al genocidio cometido por parte de Kiev, y atajar los riesgos de seguridad nacional que representa el avance de la OTAN hacia el este.