"Tras el ataque terrorista a la instalación de Tusas ubicada en el distrito Karamankazan de Ankara, se han incrementado las medidas de seguridad en toda Turquía. El nivel de alerta fue elevado a naranja [penúltimo] debido a los planes de organizaciones terroristas de atacar aeropuertos", informó el medio.
El pasado 23 de octubre, un atacante suicida detonó un artefacto explosivo cerca de una instalación de la empresa Tusas, donde trabajan unos 17.000 empleados de la compañía. La explosión fue seguida por un tiroteo.
Las autoridades reportaron que dos terroristas fueron eliminados en el lugar. Por el momento, informaron de al menos cinco víctimas mortales y 22 heridos en el ataque.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, condenó el atentado desde la ciudad rusa de Kazán, donde participó en la XVI Cumbre del grupo BRICS, y prometió que Turquía seguirá luchando con determinación contra el terrorismo.