La resolución fue adoptada con 124 votos a favor, 14 en contra y 43 abstenciones. Entre los países que votaron en contra se encuentran Estados Unidos, la República Checa y Hungría.
El texto exige "que Israel ponga fin sin demora a su presencia ilegal en los territorios palestinos ocupados", pues eso "constituye un acto ilícito de carácter continuado".
La Asamblea General de la ONU instó al Estado judío a que se repliegue "a más tardar 12 meses después de la adopción de la presente resolución".
El 7 de octubre de 2023, Israel sufrió un ataque sin precedentes por parte de Hamás. En respuesta, el Estado judío lanzó una operación militar en la Franja de Gaza, cuyo objetivo declarado era la destrucción de Hamás. Como consecuencia de los combates, según el Ministerio de Sanidad de Gaza, más de 41.000 personas han muerto y más de 95.000 han resultado heridas.