Las declaraciones las hizo luego de reunirse con una delegación del Gobierno de EEUU encabezada por Elizabeth Sherwood-Randall, asesora de seguridad de la Casa Blanca, y el embajador estadounidense en México, Ken Salazar.
"México es un Estado libre y soberano donde
hay Estado de derecho y certidumbre, procuramos la justicia en todos los sentidos", subrayó.
Sheinbaum, emanada de la coalición gobernante que encabeza el partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), respondió así a preguntas sobre
el nerviosismo entre inversores ante el anuncio de las próximas reformas a la Constitución, que causó caídas en la bolsa de valores mexicana y
retrocesos del peso ante el dólar en el mercado de divisas.
La virtual presidenta electa mencionó que en su reunión con representantes del Gobierno estadounidense abordó temas de comercio, seguridad, migración y contrabando de armas.
"Hay estabilidad social y política en el marco del cumplimiento de las normas, y con este intercambio comercial, la relocalización de empresas, eso va a continuar", prosiguió.
El encuentro se realizó en la sede del
equipo de transición de Sheinbaum.
El país latinoamericano es el primer socio en la lista del comercio exterior de EEUU. Al respecto, Sheinbaum comentó que ese intercambio y las inversiones no se detuvieron ni en las peores crisis económicas que ocurrieron fuera del margen jurídico.
La exjefa de Gobierno de la capital de México puso como ejemplo a la directora ejecutiva de la firma comercial estadounidense Walmart, quien le comunicó la víspera su interés en continuar invirtiendo en México.
"Como ellos, hay muchos otros inversionistas", agregó.
La virtual sucesora del presidente Andrés Manuel López Obrador confirmó su intención de impulsar en el Congreso el paquete de reformas a la Constitución que propuso el actual mandatario.
"Tiene que avanzar la reforma al Poder Judicial, fue parte de lo que se planteó en la campaña, y no tiene por qué haber preocupaciones porque finalmente es para fortaleza de la justicia en nuestro país", dijo.
El nerviosismo que generan estos anuncios llevó a
la moneda mexicana a cerrar la sesión cotizando alrededor de 18,56 pesos por dólar, que representa una depreciación de 1,74 por ciento o 31,6 centavos menos en una jornada, según reportes de los mercados de divisas.
El martes, la cotización del peso mexicano, que se rige por la oferta y la demanda del mercado, fue la divisa más depreciada entre los principales cruces frente al dólar y se ha desplomado un 8% desde las elecciones del 2 de junio.
Puede haber "alguna situación en estos momentos (volatilidad) pero yo
confío que la economía es sólida y siempre va a haber diálogo con todos los sectores, lo importante es que sepa" sobre el proyecto de reforma, respondió a periodistas.
Al mismo tiempo, indicó que impulsará una "agenda del pueblo", que es un proyecto de nación que tiene que continuar.
Los bonos de la deuda mexicana a 10 años subieron el 11 de junio 24,8 puntos base por encima del cierre de la jornada previa (casi 0,25 puntos porcentuales), y se colocaron en la subasta semanal del mercado secundario en 10,46%, "lo que implica un mayor costo de financiación para el Gobierno", dice un informe del Grupo Financiero Banco Base.
Lo mismo ocurrió con los bonos M (México) a 30 años, "cuya tasa se ubicó en 10,53% subiendo 20,5 puntos base con respecto al cierre de ayer (10 de junio)", indica el reporte de los mercados.