Tras haber sido inmovilizado, el tanque estadounidense M1 Abrams fue neutralizado completamente por varios golpes de proyectiles de artillería Krasnopol de 152 mm que tienen un sistema de guiado por láser. En cuanto al blindado Bradley, al ser alcanzado, el vehículo se incendió y quedó completamente destruido por el fuego.
Rusia continúa desde el 24 de febrero de 2022 la operación militar especial con el objetivo de defender las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, previamente reconocidas por Moscú como Estados soberanos, frente al genocidio cometido por parte de Kiev, y atajar los riesgos de seguridad nacional que representa el avance de la OTAN hacia el este.
Moscú ha advertido en reiteradas ocasiones que la OTAN está "jugando con fuego" al suministrar armas a Ucrania y que los convoyes extranjeros con armas serían un "objetivo legítimo" para su Ejército una vez cruzada la frontera.