Las crecidas afectan ahora a 27 municipios, principalmente en el este de la región de Oremburgo donde se declaró situación de emergencia.
"Han sido evacuadas 4.064 personas, incluidos 885 niños, y se han cerrado 47 puentes en 31 municipios. No hay restricciones de tráfico en autopistas federales", precisó el gobierno regional.
Más de 8.800 viviendas en la provincia se han quedado sin luz a causa de las crecidas; 41 brigadas de emergencia, ayudadas por 41 medios, están trabajando para restablecer el suministro eléctrico, según el comunicado oficial.
El gobernador de Oremburgo, Denís Pásler, estimó con anterioridad que la situación podría mejorar en los próximos días.
Según el funcionario, la cantidad de agua que entra en el embalse Iriklínskoye ha disminuido, lo que permite reducir el volumen del desembalse en unos 500 metros cúbicos por segundo, más de un tercio con respecto al nivel actual.
El ministro de Emergencias ruso, Alexandr Kurenkov, calificó de "crítica" la situación en la ciudad de Orsk, donde el viernes reventó un dique de contención en el río Ural.
"Como resultado, quedaron anegadas 4.518 viviendas y 4.587 huertos", dijo el ministro, que se desplazó a la provincia de Oremburgo para evaluar la situación sobre el terreno.
Según Kurenkov, se instalaron en Orsk 11 centros de acogida con capacidad para más de 8.000 personas; 510 residentes locales, entre ellos 116 niños, ya hallaron refugio provisional allí.
Anteriormente, el ayuntamiento de Orsk informó de cuatro fallecimientos en medio de las inundaciones: dos personas han sufrido infarto, una ha muerto por causas naturales y otra más ha cometido suicidio.
"Hay cuatro personas muertas: dos han sufrido infarto, una tercera ha fallecido por causas naturales y otra más ha cometido suicidio. No se han registrado decesos como resultado de la crecida", aclaró un portavoz del ayuntamiento.
Por su parte, la refinería de petróleo de Orsk anunció hoy que suspende las operaciones "ante una crecida anómala, para evitar riesgos medioambientales y acatar los requisitos de seguridad, en primer término, los relacionados con la seguridad laboral".
El 5 de abril reventó un dique de contención que protegía la ciudad de las crecidas del río Ural. Como consecuencia, las autoridades ordenaron el desalojo de la parte antigua de Orsk: varios pueblos que están anegados ahora.
Las autoridades de Oremburgo estimaron el impacto de las inundaciones en la economía regional en más de 220 millones de dólares.
"De acuerdo con una estimación operativa, el daño por la crecida totalizará unos 21.000 millones de rublos [unos 227,1 millones de dólares]", publicó la portavocía del gobierno regional en su cuenta de Telegram.
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