"Occidente, principalmente Estados Unidos, hace todo lo posible por silenciar nuestro foro, es más, obstaculiza directamente su labor", informó Andréi Klímov, miembro del Consejo de la Federación (Cámara Alta del Parlamento ruso), en una sesión informativa dedicada a la reunión inaugural del foro.
El político ruso citó varios ejemplos, entre los cuales está la denegación del acceso al vuelo al diputado de Perú, Guillermo Bermejo, debido a una prohibición estadounidense, ya que su ruta hacia Moscú pasaba por el cielo del país norteamericano.
Además, agregó, en un país de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN), una destacada figura política que se disponía a venir a Moscú, canceló su viaje tras ser "entrevistado". En palabras de Klímov, hubo varias situaciones de este tipo.
El alto funcionario sugirió también la creación de un día en memoria de las víctimas del colonialismo para mantener vivo el recuerdo de este período histórico y evitar que sea reescrito, y culpó al Occidente colectivo a "saquear" al resto del mundo.
De acuerdo con Klímov, las delegaciones "ya están empezando a venir" a Moscú. En total, se han acreditado para el foro unos 200 ciudadanos extranjeros, que vienen de "medio centenar de países" y representan a "unos 60 partidos políticos y organizaciones públicas, movimientos y algunas estructuras internacionales".
El evento constitutivo del foro de partidarios de la lucha contra las prácticas modernas del neocolonialismo Por la libertad de las naciones tendrá lugar del 15 al 17 de febrero en Moscú.
Como informó el vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia, Dmitri Medvédev, se espera la participación de los dirigentes de los partidos políticos, representantes de los países de la ASEAN, invitados de África, América Latina y Oriente Medio.
También está prevista la intervención del propio Medvédev y del ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov.
La próxima reunión ampliada del ya permanente comité del movimiento
Por la Libertad de las Naciones se celebraría probablemente a finales de julio de 2024 en la ciudad de Vladivostok, pronosticó Klímov, agregando que Rusia "tratará de combinarlo con
nuestra presidencia de los BRICS".