Los fallecidos en la Franja ascienden a más de 25.700, según las autoridades sanitarias del enclave, y los heridos son al menos 63.740 desde que empezó la guerra entre Israel y Hamás, el pasado 7 de octubre.
El portavoz del Ejército israelí también confirmó que las tropas mataron a decenas de terroristas en Jan Yunes el último día.
"En redadas en el barrio de Al Amal y en otros lugares, el Ejército destruyó infraestructuras terroristas y se apoderó de armas", decía el comunicado militar israelí.
El pasado 7 de octubre, el movimiento islamista palestino Hamás atacó Israel desde la Franja de Gaza, causando unos 1.200 muertos, cerca de 5.500 heridos y capturando a más de 250 rehenes.
En represalia, Israel declaró la guerra a Hamás e inició ataques masivos contra Gaza, al tiempo que imponía un bloqueo total al enclave palestino, cortando el suministro de agua, alimentos, medicinas, electricidad y combustible. El 27 de octubre, Israel lanzó una incursión terrestre a gran escala en la Franja de Gaza.
Del 24 de noviembre al 1 de diciembre, durante una tregua humanitaria pactada con la mediación conjunta de Catar, Egipto y Estados Unidos, se canjearon 80 rehenes israelíes de Hamás, en su mayoría mujeres y niños, por 240 presos palestinos sin delitos de sangre. Además, las milicias palestinas liberaron a casi 30 cautivos más, en su mayoría tailandeses residentes en Israel. Unos 136 rehenes todavía permanecen cautivos en Gaza.
Al expirar la tregua, las operaciones bélicas se reanudaron y el flujo de ayuda humanitaria que llega al sur del enclave palestino desde Egipto se redujo nuevamente a una quinta parte de lo que Gaza recibía antes de esa guerra, según la ONU.
Rusia y otros países instan a Israel y a Hamás a pactar un alto el fuego y abogan por una solución de dos Estados, aprobada por la ONU en 1947, como la única vía posible para lograr una paz duradera en la región.