"En los últimos 100 días, los bombardeos sostenidos en toda la Franja de Gaza han provocado el desplazamiento masivo de una población que se encuentra en un estado de flujo: constantemente desarraigada y obligada a marcharse de la noche a la mañana, solo para trasladarse a lugares igual de inseguros. Ha sido el mayor desplazamiento del pueblo palestino desde 1948", dijo Philippe Lazzarini, Alto Comisionado de la Agencia de la ONU para la Ayuda a los Refugiados Palestinos (UNRWA, por sus siglas en inglés).
"Esta guerra ha afectado a más de dos millones de personas, toda la población de Gaza. Muchos llevarán cicatrices de por vida, tanto físicas como psicológicas. La gran mayoría, incluidos los niños, están profundamente traumatizados", agregó Lazzarini en un pronunciamiento con motivo de los 100 días de conflicto en la Franja de Gaza.
De acuerdo con el alto funcionario internacional, los refugios de la UNRWA, superpoblados e insalubres, se han convertido en el "hogar" de más de 1,4 millones de personas.
"Carecen de todo, desde comida hasta higiene e intimidad. Viven en condiciones inhumanas, donde las enfermedades se propagan, incluso entre los niños. Viven en lo invivible, con el reloj avanzando rápidamente hacia la hambruna", alertó el titular de la agencia humanitaria.
"La difícil situación de los niños en Gaza es especialmente desgarradora. Toda una generación de niños está traumatizada y tardará años en curarse. Miles han muerto, han quedado mutilados y huérfanos. Cientos de miles están privados de educación. Su futuro está en peligro, con consecuencias de largo alcance y duraderas", añadió el Alto Comisionado de la UNRWA.
Lazzarini relató que la operación humanitaria se ha convertido rápidamente en una de las más complejas y difíciles del mundo; en gran parte debido a los "engorrosos" procedimientos para la entrada de ayuda en la Franja de Gaza y a una miríada de obstáculos para la distribución segura y ordenada de la ayuda, incluidas las hostilidades en curso.
"La ayuda humanitaria por sí sola no será suficiente para revertir una hambruna inminente. También debe permitirse la entrada de bienes comerciales", reclamó.
"El Derecho Internacional Humanitario, establecido para proteger a los civiles y regular el desarrollo de las hostilidades, se incumple con regularidad. Civiles e infraestructuras civiles, incluidos hospitales y refugios de la UNRWA, han sido atacados en los últimos tres meses, matando a cientos de civiles e hiriendo a miles", dijo Lazzarini.
El Alto Comisionado hizo un llamado a que se declare en la zona un alto al fuego humanitario que ponga fin a la matanza de personas en Gaza y permita el suministro seguro de alimentos, medicinas, agua y refugio, sobre todo ahora, ante la llegada del invierno.
"Trabajadores humanitarios, entre ellos 146 de mis propios colegas de la UNRWA, fueron asesinados junto a médicos, periodistas y niños: nadie se libra. Barrios residenciales enteros, lugares de culto y edificios históricos fueron arrasados, borrando siglos de historia, civilización y recuerdos de la gente", dijo Lazzarini.
"Para la población de Gaza, los últimos 100 días han parecido 100 años. Ya es hora de que recuperemos el valor de la vida humana", concluyó.
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