Hamás también pidió a los líderes de la comunidad musulmana que utilicen "todas sus capacidades para presionar a la Administración estadounidense, responsable directa de la guerra genocida en Gaza".
El pasado 7 de octubre, este movimiento palestino que gobierna en Gaza realizó ataques sorpresa sin precedentes en varios puntos de Israel, provocando la muerte de más de 1.200 personas y tomando centenares de rehenes, en lo que se considera uno de los peores ataques contra el Estado israelí.
En represalia, Tel Aviv declaró que estaba en "estado de guerra" y advirtió que eliminaría a Hamás; sin embargo, en su ofensiva también han muerto miles de civiles gazatíes,
incluidos niños, mujeres y ancianos.
Horas antes,
57 países árabes y de mayoría musulmana participaron en la
cumbre conjunta de la
Organización de Cooperación Islámica (OCI) y de la
Liga Árabe para abordar la situación en el enclave palestino. En dicha reunión, se determinó que "ni Israel ni todos los países de la región gozarán de paz y seguridad" hasta que se establezca un Estado palestino independiente.
La declaratoria final de la cumbre afirma que Israel es el responsable de
"la continuidad del conflicto y de su agravamiento", y establece que la ocupación israelí de las tierras palestinas son "una amenaza para la seguridad y a la estabilidad regional e internacional".
De este modo, los líderes del mundo árabe y musulmán decidieron emitir una declaratoria en la que se exige el cese al fuego inmediato en la Franja de Gaza, el fin del asedio israelí contra el pueblo palestino de ese lugar y el acceso rápido de la población civil a la ayuda humanitaria y los servicios básicos.
Por su parte, el presidente sirio Bashar Assad instó a los países árabes e islámicos a terminar sus relaciones con Israel como represalia por sus agresiones contra Gaza.
"Si no tenemos herramientas reales para presionar, no tendrá sentido dar más pasos. Al menos tenemos herramientas políticas. En primer lugar, tenemos que poner fin a cualquier vínculo político con la entidad sionista, en todos los sentidos de la palabra, empezando por la economía", señaló Assad.