"[Los integrantes del Banco Mundial] también anuncian y anuncian; son especialistas en emitir comunicados. Lo que queremos nosotros es resolver lo más pronto posible [la situación], por las necesidades de la gente. No vamos a esperar a hacer trámites; ya estamos trabajando", afirmó en su conferencia de prensa.
El mandatario mexicano reiteró que hay presupuesto ilimitado para atender a los 47 municipios que tuvieron daños severos por el paso del huracán, que tocó tierra en categoría 5 de la escala Saffir-Simpson, a finales de octubre. Hasta el momento, hay 47 personas fallecidas y 53 desaparecidas.
El comentario surge después de que, el extitular del Banco Mundial, Marcelo Giugale dijo en el medio mexicano Aristegui Noticias que el Gobierno mexicano cuenta con un seguro con la institución contra desastres naturales, donde se incluye la cobertura por sismos y huracanes.
"Recuerdo que esa póliza tenía un pago total, por terremotos y por huracanes, de unos 400 millones de dólares, la mitad para uno y la mitad para el otro. Dentro de lo que era huracanes, era mitad para el Atlántico y mitad para el Pacífico", afirmó.
Según Giugale, los daños causados por el huracán Otis en Guerrero serían suficientes para que México pudiera obtener esos recursos.
"Así que, si califica, que yo creo va a calificar, esta es mi opinión personal, son unos 100 millones de dólares para atender las necesidades inmediatas. Por supuesto, reconstruir Acapulco y sus zonas afectadas será mucho más caro, pero ayuda de entrada", puntualizó el experto.
4 de noviembre 2023, 00:32 GMT
Recientemente, el presidente mexicano admitió que el costo por la devastación causada en el territorio guerrerense, incluido el emblemático puerto de Acapulco, es "cuantioso".
"Fue bastante el daño. Vamos a llevar a cabo una reconstrucción. Teníamos contemplado terminar todas las obras que hemos iniciado. Desde luego, esto fue un imprevisto y requiere actuar con emergencia y destinar recursos que, afortunadamente, los tenemos y vamos a destinar" para ayudar a la población, puntualizó el 3 de noviembre.
El Gobierno mexicano está desplegando una estrategia para ayudar a Acapulco y Coyuca de Benítez, dos de los municipios devastados por el huracán Otis, que cuenta con un presupuesto de 61.313 millones de pesos (más de 3.400 millones de dólares).
No obstante, la cifra presentada para atender la situación contrasta con las previsiones hechas por expertos, calificadoras y la firma de análisis de riesgo Enki Research.
Según sus estimaciones, el monto del Gobierno de México no sería suficiente, ya que las pérdidas monetarias que ellos identifican rondarían los 15.000 millones de dólares, es decir, cerca de 300.000 millones de pesos, por lo que se requeriría un presupuesto muy superior para atender las necesidades de la región.
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