"Nuestras preocupaciones sobre el uso de uranio empobrecido en cualquier parte del mundo han sido consistentes y se mantienen", dijo el funcionario.
Rusia ha advertido en repetidas ocasiones sobre la entrega de este tipo de municiones a Kiev, debido a los riesgos que el uranio empobrecido podría suponer para la población civil.
Tanto Estados Unidos como la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) han usado este tipo de municiones, siendo uno de los casos más icónicos los bombardeos contra partes de la extinta Yugoslavia, territorio en donde se comenzó a registrar un aumento de casos oncológicos. Hasta el momento, el único país que ha suministrado este tipo de municiones es el Reino Unido.