"El destino real de Ucrania figura como algo secundario. La verdadera cuestión se centra en reavivar las socavadas aspiraciones de hegemonia mundial estadounidense", apuntó el espacio informativo.
Además, destaca que el establishment de seguridad nacional estadounidense apoya la idea de que Washington debe seguir siendo la única superpotencia del mundo, aunque para ello sea necesario ignorar muchos indicios claros que sugieren el surgimiento de un orden multipolar.
En este contexto, derrotar a Rusia en el conflicto actual sin tener que luchar de verdad "se convierte en el medio de restaurar la imagen de indispensabilidad estadounidense dilapidada durante décadas".
Además, con la victoria de Ucrania, la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) —que está liderada por EEUU— se reivindicaría y, con un impulso de Washington, centraría su atención en la región Asia-Pacífico, "con China como adversario elegido", señaló American Conservative.
"De este modo, Ucrania servirá de una 'plantilla' para que EEUU y sus aliados extiendan su influencia a miles de kilómetros de Europa", resumió el autor del artículo.
En mayo, el presidente ruso, Vladímir Putin, declaró que los países que abogan por la unipolaridad dañan la economía mundial, disparándose en el pie a sí mismos y a los que se ven obligados a someterse a su dictado.