Wang Wenbin, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, aseveró que su país se opone "firmemente" a desprestigiar y atacar a otras naciones o a imponer sanciones unilaterales a otros Estados en nombre de la lucha contra los estupefacientes.
Por ello, Pekín pidió a la Casa Blanca trabajar para la formación de un esquema de condiciones que permita la cooperación internacional en la lucha contra las drogas.
En días pasados, la Administración Biden pidió a China que haga más para combatir la propagación de drogas sintéticas ilícitas. Además, afirmó que no ha visto ninguna señal de que Pekín planee
unirse a una coalición de unos 84 países que trabajarán para interrumpir la propagación del
fentanilo y otras drogas.
En los últimos meses se ha incrementado la tensión entre Washington y Pekín por el combate al fentanilo que, según la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés), se fabrica en laboratorios clandestinos en México con base en precursores químicos enviados desde la nación asiática.
La detención a finales de junio de
dos ciudadanos chinos y la presentación de cargos contra otros seis y cuatro empresas por parte del Departamento de Justicia de Estados Unidos, bajo los cargos de tráfico de drogas, agudizó
el enfrentamiento entre los dos Gobiernos.El pasado 29 de junio, China emitió una declaración en la que defendió su política de cooperación antinarcóticos con otros países y con la ONU.
"Con un sentido humanitario, China catalogó y puso bajo control e inspección toda la clase de sustancias relacionadas con el fentanilo, lo que ha jugado un papel importante en la prevención de la fabricación ilícita, el tráfico y el uso indebido del fentanilo", señaló el Gobierno chino en un posicionamiento divulgado por el Ministerio de Exteriores.
"Lo que Estados Unidos ha venido haciendo hasta ahora para abordar su preocupación por el problema de las drogas, ya sean tácticas de presión, coacción o algún tipo de operaciones ilegales, consiste esencialmente en buscar aplicación externa para curar enfermedades internas. Esto no funcionará y no beneficia a nadie", precisó Pekín.
El país gobernado por Xi Jinping también señaló que si Estados Unidos realmente quiere resolver su problema doméstico de las drogas, debe respetar los hechos, reflexionar sobre sí mismo, corregir sus errores y dejar de culpar a otros.
"Estados Unidos debe levantar inmediatamente todas las sanciones contra las instituciones policiales antinarcóticos chinas, dejar de ofrecer recompensas para cazar a empresas o ciudadanos chinos, poner fin a las detenciones arbitrarias y liberar inmediatamente a los ciudadanos chinos bajo arresto ilegal", concluyó el Gobierno chino.