"Durante años, desde la derecha, la izquierda y el centro se advirtió al establishment de seguridad nacional estadounidense de que EEUU debía cambiar su política hacia Rusia. Se advirtió de que Rusia no podía ser derrotada desde fuera", escribió el exfuncionario en el artículo para The American Conservative.
En este sentido, Carden explicó que Washington arruinó las relaciones ruso-estadounidenses en la era postsoviética cometiendo cuatro errores:
1.
El apoyo de la campaña de Ucrania contra sus ciudadanos rusohablantes, que desembocó en un conflicto real.2.
La "conversión" de los corruptos oligarcas ucranianos en un panteón de "semidioses".3.
La mezcla de los intereses de las facciones nacionalistas de extrema derecha de Kiev y Leópolis (y sus aliados en Polonia, Lituania, Latvia y Estonia) con los intereses nacionales de EEUU.4.
La indiferencia ante las numerosas protestas de Rusia contra la expansión de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).Sin embargo, destacó Carden, la élite dirigente estadounidense decidió ignorar estas advertencias, y "los resultados hablan por sí solos".