"Necesitamos medidas concretas y urgentes del Gobierno para paliar la gravísima situación de retraso en el ingreso de los sectores populares", afirmó en las redes sociales el secretario general de la rama autónoma de la Central de Trabajadores de Argentina (CTA) y la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), Hugo Cachorro Godoy.
Ante la movilización de miles de personas que salieron a las calles en la capital argentina para protestar frente ante el Ministerio de Economía, el sindicalista sostuvo que "sigue creciendo la pobreza y el hambre,
mientras el FMI aplica su plan de ajuste fiscal, inflacionario y recesivo para la economía".
La CTA-Autónoma demanda al Gobierno argentino un aumento salarial de emergencia para trabajadores informales y jubilados, además de un salario universal "para terminar con el hambre y la pobreza".
La central obrera se manifestó también contra el acuerdo que el actual Gobierno de Alberto Fernández suscribió en marzo de 2022 con el FMI para refinanciar un crédito de 44.000 millones de dólares asumido por la gestión anterior de Mauricio Macri (2015-2019).
Respaldaron este reclamo otras organizaciones sociales, como la Corriente Clasista y Combativa (CCC), el Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), sectores del Frente Popular Darío Santillán (FPDS), Somos Barrios de Pie y la Unión de Trabajadores y Trabajadoras de la Economía Popular (UTEP).
"Basta de ajuste del FMI" fue el lema de otra marcha protagonizada por el Movimiento Evita, cuyo líder, Emilio Pérsico, administra los planes sociales que provienen del Ministerio de Desarrollo Social.
Esto no impidió que la organización llevara su marcha hasta la sede de la cartera que dirige la ministra Victoria Tolosa Paz, cuestionada por dar de baja a más de 85.000 beneficiarios del programa Potenciar Trabajo.
Este plan del Gobierno paga medio salario mínimo, 34.740 pesos (159 dólares al cambio oficial), por cuatro horas diarias de trabajo a
personas en situación de vulnerabilidad para acceder a un empleo formal.
Esta es la segunda manifestación que convoca el Movimiento Evita desde el inicio de la actual gestión, en diciembre de 2019. La primera fue a finales de 2022.
En el marco del programa de Facilidades Extendidas suscrito con el Gobierno, el FMI ratificó el objetivo de que el Ejecutivo reduzca el déficit fiscal primario de 2,3% del Producto Interior Bruto (PIB) en 2022 al 1,9% este año.
Las calles de la capital argentina fueron testigo en las últimas semanas de varias protestas del crisol de organizaciones sociales que confluyen en Unidad Piquetera,
en un marco de elevada inflación que llevó a que
el encarecimiento de bienes y servicios llegara al 102,5% interanual.