"La incitación del Gobierno contra las protestas provoca esto: Matones violentos se comportaron salvajemente en todo el país. Pido al Likud [partido que lidera Netanyahu] que contenga a sus matones y al primer ministro que los condene enérgicamente", tuiteó el líder de la oposición, Yair Lapid.
En una declaración conjunta, los líderes de la protesta comunicaron oficialmente: "El aumento de la violencia es el resultado directo de la incitación que se origina en Netanyahu. Cuando el hijo del primer ministro llama nazis a los manifestantes, esto es lo que sucede".
Yair Netanyahu comparó el viernes a los manifestantes con el grupo paramilitar Sturmabteilung de los nazis, o SA, en redes sociales.
El líder del partido Unidad Nacional, Benny Gantz, declaró por su parte: "La violencia contra los manifestantes está aumentando en todo el país y la guerra civil está cerca. Netanyahu, la responsabilidad es suya. Llame a que se detenga la violencia, pise los frenos ahora... pare todo. Nos acercamos al abismo".
Entre los incidentes violentos contra los manifestantes, la policía dijo que detuvo a un hombre de 57 años que supuestamente estrelló su automóvil contra un grupo de manifestantes en Herzliya, hiriendo levemente a un manifestante, y también a un hombre de 24 años por conducir una motocicleta contra otro grupo de manifestantes en el suburbio de Givatayim en Tel Aviv.
Varios activistas de derecha, algunos de ellos enmascarados, fueron vistos confrontando físicamente a los manifestantes en Tel Aviv.
Más de 260.000 personas se manifestaron en todo el país, incluidas 175.000 en Tel Aviv, 20.000 en Haifa, 4.000 en Netanya, 11.500 en Herzliya, según un recuento independiente facilitado por el canal 13 de noticias.
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