El anuncio, hecho en junio de 2022 por el propio presidente Nayib Bukele, se concretó apenas seis meses después, cuando el Gobierno salvadoreño presentó las instalaciones del denominado Centro de Confinamiento de Terrorismo (CECOT), una megacárcel con capacidad para 40.000 reclusos que ya se ganó la fama de ser la cárcel más grande de América Latina.
"Aquí terminarán los días de todos los terroristas que durante años aterraron a El Salvador. Serán el ejemplo del castigo que recibirán aquellos que pretendan atentar contra la población", anunció la Presidencia salvadoreña en una publicación oficial, acompañada de un video de las flamantes instalaciones.
3 de diciembre 2022, 16:00 GMT
La nueva cárcel está pensada para albergar, bajo condiciones de máximas seguridad, a "terroristas pandilleros capturados por las fuerzas del orden", en el marco del régimen de excepción decretado por la Asamblea Legislativa en 2022 y que, según cifras oficiales, permitió la detención de más de 62.000 pandilleros en menos de un año de aplicación.
El CECOT está en Tecoluca, una ciudad del departamento de San Vicente a unos 70 kilómetros al este de San Salvador, la capital del país. Tiene una extensión de 163 hectáreas, una magnitud equivalente a "casi siete veces el tamaño del Estadio Cuscatlán", el escenario deportivo más grande de El Salvador y de Centroamérica.
"Si un terrorista intenta escapar del CECOT tendrá que enfrentarse a 19 torres de vigilancia, dos cercos perimetrales de malla ciclón totalmente electrificados y otros dos cercos de concreto que garantizan que nadie pueda salir del recinto", destacó el Gobierno de Bukele en una publicación oficial.
En diálogo con Sputnik, el politólogo salvadoreño Luis Contreras, especializado en seguridad ciudadana, afirmó que la construcción de la nueva cárcel "indudablemente viene a complementar el denominado Plan de Control Territorial" aplicado por Bukele desde su asunción y que según el experto aceleró sus resultados con el régimen de excepción, una herramienta "que el presidente no se sacó de la manga sino que es de origen constitucional".
Para Contreras, la construcción de una megaprisión en El Salvador responde a la gran cantidad de criminales que han sido capturados en los últimos años y que pasarán un tiempo considerable tras las rejas en virtud de uno de los pilares de la política de seguridad del presidente salvadoreño: los cambios en el Código Penal.
El especialista puso como ejemplo la tipificación como delito de los tatuajes alusivos a pandillas, una acción que bajo el nuevo código puede implicar 15 años de prisión. Así, varios pandilleros que ya estaban listos para recuperar la libertad, podrían volver a ser encarcelados por sus tatuajes. "Si vamos a la parte técnica, las modificaciones al Código Penal han sido el éxito del plan de seguridad", sostuvo.
"Esto ha sido un éxito tal al grado de que los pandilleros han buscado irse a Guatemala y Honduras. Jamás había visto esa desesperación de los criminales por querer no parecer pandilleros para no ser condenados por esos delitos", añadió.
En efecto, la nueva cárcel de máxima seguridad estará reservada únicamente para los criminales que son condenados por pertenecer a pandillas. Contreras destacó que el nuevo penal no solo permitirá descongestionar otras cárceles del país sino que permitirá demostrar de forma más cabal el éxito que según él también ha tenido la política penitenciaria de Bukele.
En ese sentido, señaló que mientras en países como Ecuador se han producido "amotinamientos" y graves incidentes en las cárceles, eso no ha sucedido en El Salvador, incluso a pesar de haber rebasado la capacidad de las cárceles antes de la construcción del CECOT.
Si bien el funcionamiento de la nueva megacárcel será en parte "prueba y error" para el país, Contreras destacó su carácter de máxima seguridad y su diseño moderno, lo que contrasta con el problema que en muchos países genera "el hacinamiento de cárceles que fueron construidas en los años 1950 o 1960, épocas en que la delincuencia y el número de habitantes era menor".
Para muchos analistas, los números actuales avalan el éxito de la política de seguridad aplicada por Bukele, ya que la cantidad de apresados se refleja en un descenso de los delitos. Mientras en 2015 el país tenía un promedio de 105 homicidios cada 100.000 habitantes, enero de 2023 se cerró con un promedio de 2 homicidios cada 100.000 habitantes, lo que llevó al Gobierno a destacar el primer mes del 2023 como "el más seguro de la historia" del país centroamericano.
En ese marco, Contreras consideró que la política de seguridad que está aplicando El Salvador puede servir de ejemplo para países "con una criminalidad similar" como los vecinos del Triángulo Norte de Centroamérica: Guatemala y Honduras.
"El Salvador se está volviendo una referencia en seguridad", destacó el experto, señalando que el país ha recibido alcaldes de países sudamericanos como Perú y Ecuador que buscan interiorizarse en maneras de neutralizar la delincuencia. El propio Contreras, consultor en temas de seguridad, comentó que lo llaman de diversas ciudades de la región interesadas en replicar el modelo salvadoreño.
Como politólogo, Contreras explicó que los buenos resultados en seguridad son los que también sostienen la altísima popularidad de Bukele, sindicado como "el presidente más popular de América Latina" por un estudio de la consultora Datoworld. En 2022, una encuesta de la consultora TResearch International aseguraba que nueve de cada 10 salvadoreños apoyan a Bukele y volvería a votarlo.
Por si fuera poco, Contreras aseguró que los éxitos en seguridad también traen consigo mejoras en la economía, ya que salvadoreños que se habían radicado en EEUU en la década de 1970 comienzan a regresar para invertir en el país, alentados por la reducción de la criminalidad. Los propios empresarios locales también se ven beneficiados con el descenso de la extorsión, un delito que vampirizaba sus utilidades y que llegaba a costarles millones de dólares anuales a algunas industrias del país.
No te pierdas las noticias más importantes
Suscríbete a nuestros canales de Telegram a través de estos enlaces.
Ya que la aplicación Sputnik está bloqueada en el extranjero, en este enlace puedes descargarla e instalarla en tu dispositivo móvil (¡solo para Android!).
También tenemos una cuenta en la red social rusa VK.