Washington ha buscado desestabilizar al país persa mediante el fomento de alzamientos como los que ocurrieron durante la llamada Primavera Árabe de 2011, dijo el mandatario y aseguró que, en cambio, las ciudades iraníes se encuentran seguras.
Desde septiembre diversas manifestaciones han desafiado a las autoridades de la república islámica, en lo que los medios evalúan como la más seria ola de protestas desde la revolución de 1979, que depuso al sha Mohammad Reza Pahlaví.
Desde entonces, Irán ha sido ubicado por la Casa Blanca como un rival geopolítico, junto a países como Venezuela y Cuba, que derivaron sus actuales sistemas políticos también de revoluciones contrarias a las rutas estadounidenses.
Ante la actual ola de manifestaciones, el presidente Joe Biden ha declarado que apoya a los inconformes. "Vamos a liberar a Irán. Ellos se liberarán a sí mismos muy pronto", aseguró el mandatario de Estados Unidos.