La galardonada golosina está elaborada con galletas artesanales y un relleno de mousse de chocolate al licor. Con 20 años de presencia en el mercado artesanal, la empresa que elabora la pieza pastelera logró convertirla en la favorita para los jueces.
La primera edición del Mundial del Alfajor se celebró en la Ciudad de Buenos Aires entre el 1 y el 5 de agosto, bajo un "estricto procedimiento de cata a ciegas". La instancia evalúo 150 muestras de productores argentinos e internacionales que
incluían tanto a pequeñas y medianas empresas, como a grandes manufactureras.
Además de decenas de marcas locales, el certamen también contó con la participación de alfajores de Colombia, Brasil, Uruguay, Canadá y España.
Evaluados por un grupo de expertos compuesto por chefs, pasteleros, influencers y catadores, las muestras podían participar en 15 categorías: con el mejor chocolate negro y blanco, el mejor dulce de leche, relleno de fruta, alfajor simple, alfajor triple, sabor tradicional, sabor exótico, textura, aroma, packaging, mejor galleta, mejor alfajor de confitería, alfajor más saludable o el mejor en la categoría de maicena.
Además del ganador mundial, los jurados designaron ganadores por cada categoría.
Para los fanáticos del chocolate negro, el oro se lo llevó un alfajor de chocolate negro con 70% de cacao y relleno de dulce de leche producido por Rústicos Chocolates, empresa también argentina.
El primer puesto en chocolate blanco se lo llevó una edición cordobesa creada a base de harina de almendras, con 70% de cacao y relleno de dulce de leche. Se trata del alfajor Premium Bari White de la marca Ególatra.
Entre los destacados internacionales, el segundo puesto en la categoría mejor aroma a alfajor se lo llevó una versión brasileña de chocolate con dulce de leche y cobertura de chocolate medio amargo; el tercer puesto para mejor packaging lo obtuvo Dulce Manjar, un alfajor paraguayo, y en la categoría mejor alfajor de maicena el primer puesto fue para Gennaro´s Artisanal Alfajores de Canadá.
Asimismo, la mención especial otorgada para pequeñas y medianas empresas se la llevó el emprendimiento uruguayo de alfajores Cuatro de Julia.
La historia del alfajor
Proveniente de España, y difundido durante el período colonial, el alfajor consta de dos capas de masa u obleas unidas por un relleno dulce que suele tener infinitas variedades: dulce de leche, miel, mousse, chocolate o membrillo, son solo algunas de las opciones más habituales.
Las variedades son infinitas y dependen también del lugar donde se consuman. Los principales países que suelen deleitarse con este postre son Argentina, Uruguay, Chile, Bolivia, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, México, Paraguay, Perú, Venezuela.
De proporciones pequeñas, esta golosina generalmente está bañada en chocolate o tiene un glaseado con azúcar en polvo conocido "como nieve".
Suele consumirse de forma individual en los desayunos o meriendas, y ocupa el lugar de postre luego de las comidas. El alfajor es elegido por niños y mayores y constituye una potencial fuente de energía y nutrientes.
Tan solo en Argentina, se consumen 70 alfajores por segundo lo que representa más de 6 millones de alfajores por día.