Durante la conferencia matutina del 30 de junio, el mandatario mexicano fue cuestionado, al margen del cuarto aniversario de su victoria electoral, sobre los compromisos cumplidos y pendientes de su gobierno, entre ellos, la resolución del también llamado Caso Iguala.
Al respecto, López Obrador reconoció que se trata de un compromiso pendiente, pero aseguró que la investigación avanza bien y ya saben "lo que sucedió".
Sin embargo, al tratarse de un tema aún en litigo, el presidente mexicano explicó que "hay que certificar esas pruebas, hay que validarlas de acuerdo a procedimientos".
"Este año va a quedar ya lo de Ayotzinapa", afirmó Andrés Manuel López Obrador.
Respecto a la extradición de Tomás Zerón de Lucio, extitular de la Agencia de Investigación Criminal acusado de alterar pruebas del caso, López Obrador aseveró que se trabaja para concretar su extradición desde Israel.
"Sí, está en Israel. Se le está dando seguimiento porque sí tiene mucha información, bastante información, sobre todo con lo de Ayotzinapa, y los otros casos también, todos, se les está dando seguimiento", afirmó el titular del Poder Ejecutivo.
El 26 de septiembre de 2014 43 normalistas de la Escuela Rural Raúl Isidro Burgos desaparecieron, presuntamente a manos del grupo delincuencial Guerreros Unidos, por órdenes de funcionarios de Iguala.
Según la "verdad histórica" que presentó el entonces procurador Jesús Murillo Karam, los normalistas fueron incinerados en el basurero de Cocula; no obstante, un grupo de expertos de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) puso en duda tal versión y denunció diversas irregularidades durante la investigación, desde alteración de pruebas hasta casos de tortura entre los más de 100 detenidos.
24 de septiembre 2021, 17:28 GMT