Luego de que un juez federal ordenara suspender las obras del tramo 5 de esta megaobra por daños al medio ambiente, el Gobierno de México desestimó la decisión del Poder Judicial y aseguró que el bloqueo no es definitivo.
"La suspensión judicial sobre la obra del Tren Maya en el Tramo 5 Sur es definitiva únicamente hasta que se resuelva de fondo la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) del proyecto, actualmente en trámite ante la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat)", indicó el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur).
La MIA está integrada por más de 4.000 documentos y fue realizada por especialistas del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) y del Instituto Mexicano de Tecnología del Agua.
Según las autoridades, esta carpeta analiza los posibles impactos ambientales que tendrá la construcción y la operación del Tren Maya, además de que contempla una serie de medidas preventivas para no atentar contra el ecosistema de la región.
El presidente López Obrador ya ha dicho que buscará "otras instancias" para detener el amparo que otorgó el juez federal Adrián Novelo en favor de suspender la construcción del tramo 5 del Tren Maya, que va de Playa del Carmen a Tulum, dos de los destinos turísticos más concurridos de México.
"No van a poder detenernos, no van a imponerse los intereses particulares, no van a estar por encima del interés general, del interés de la gente, del interés del pueblo, del interés de la nación, antes hacían y deshacían, pero ya no es así", sostuvo el presidente de México en su conferencia de prensa del 31 de mayo.
Se trata de la primera suspensión que detendría este megaproyecto de manera indefinida.
Desde hace algunos meses, el Poder Judicial ha admitido, al menos, cinco amparos que pretenden frenar las obras porque éstas supuestamente atentan contra el medio ambiente y destruyen la selva.