"Hemos debatido sobre la convocatoria errática de la llamada Cumbre de Las Américas en Los Ángeles [EEUU, suroeste], decimos convocatoria errática porque se ha pretendido y se pretende excluir de esa reunión en Los Ángeles que se autodenomina Cumbre de las Américas, excluir a los pueblos de Nicaragua, Cuba y Venezuela", indicó el jefe de Estado durante el discurso ofrecido en la clausura de la Cumbre del ALBA.
Durante la transmisión de su discurso a través del canal estatal Venezolana de Televisión, Maduro destacó que en las últimas semanas se evidenció el poder de la consciencia de América Latina y el Caribe.
"La protesta general de los Gobiernos, países y pueblos de América Latina al pretendido proceso de exclusión de los pueblos de Nicaragua, Venezuela y Cuba. Hemos visto como surgen las voces del Caricom [Comunidad del Caribe] de manera única y contundente, 14 Gobiernos, tenemos que darles las gracias por su voz valiente", añadió.
De igual forma, el jefe de Estado reiteró su agradecimiento a la voz "firme y valiente" del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, quien abiertamente se opuso a la decisión de excluir países del continente de la referida Cumbre, que se celebrará entre el 6 y 10 de junio en Los Ángeles.
"La agradecemos al presidente Andrés Manuel López Obrador por ir al frente de esta jornada en defensa de la verdad, de la unión, del debate democrático (…) la voz del continente retumba, resuena en consciencia", apuntó.
La Cumbre de las Américas es un evento en el que participan 35 Gobiernos del continente americano y que, desde su comienzo, en 1994, se realiza en una nación diferente, con excepción de esta ocasión en la que vuelve al país en el que se inauguró.
El objetivo de este foro, según lo expuesto en los portales web de las Cancillerías de los países que lo integran, es reunirse para tratar temas diplomáticos y comerciales de importancia a nivel continental.
Desde su creación en Los Ángeles, la Cumbre fue un espacio para promover el Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA), un proyecto de la Casa Blanca que jamás consiguió respaldo absoluto, y que excluía Cuba.
La última Cumbre se realizó en 2018 y la sede fue Perú, país en el que también se reunían las naciones que buscaban aislar a Venezuela, tras las presidenciales de ese año en las que resultó reelecto Nicolás Maduro.
En 2018, Perú excluyó a Venezuela, pero mantuvo a Cuba, país que había participado en la anterior Cumbre de 2015, celebrada en Panamá, y que calificó como un retroceso la decisión del presidente de EEUU, Joe Biden, de no incorporar a la que se realizará este año.
Durante su intervención, el mandatario venezolano también denunció que Venezuela fue objeto del robo de la filial en EEUU de la estatal Petróleos de Venezuela S.A, Citgo, que aseguró está valorada en más de 12.000 millones de dólares.
Sin embargo, sostuvo que a pesar de estas medidas su país está en el camino de la recuperación "integral económica, social, política y moral".
En tal sentido, sostuvo que el camino de los países de América Latina es la integración a través de bloques como ALBA, Caricom, y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC).
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