A diferencia de Wimbledon, el torneo de Roland Garros sí aceptará la participación de tenistas de Rusia y Bielorrusia, pero con una serie de condiciones: ningún jugador podrá elogiar ni apoyar a Moscú ni tampoco se exhibirán la bandera ni el himno rusos.
Así lo advirtió Amelie Mauresmo, directora de este certamen que es uno de los cuatro torneos de Grand Slam del año, en una entrevista con la estación radiofónica, France Inter.
"Estamos en la línea de lo decidido por los ministros de Deportes de la Unión Europea. No acogeremos equipos, pero sí a deportistas individuales [rusos o bielorrusos]. Obviamente, si un deportista se muestra ante la prensa pro-Putin, habrá sanciones", aseguró Mauresmo.
11 de mayo 2022, 19:34 GMT
Tenistas ucranianas como Elina Svitolina se han quejado de que los torneos de la Asociación de Tenistas Profesionales (ATP) y la Asociación de Tenis Femenino (WTA) permitan competir a atletas rusos y bielorrusos, en medio del conflicto que se libra en Europa del Este entre Rusia y Ucrania desde el pasado 24 de febrero.
Sin embargo, la ATP ya ha dejado clara su postura: no está de acuerdo con excluir a ningún tenista por motivos ajenos al deporte.
"Creemos que la decisión unilateral tomada por Wimbledon y la LTA de excluir a los jugadores de Rusia y Bielorrusia del torneo británico sobre pasto de este año es injusta y puede sentar un precedente perjudicial para el deporte", señaló la organización el 20 de abril pasado.
También mencionó que la discriminación basada en la nacionalidad constituye "una violación de nuestro acuerdo con Wimbledon, que establece que la entrada de jugadores se basa únicamente en la clasificación de la ATP".
Varios jugadores como Novak Djokovic han exigido a la Asociación de Tenistas Profesionales (ATP) que, en caso de que el veto sí sea aplicado, Wimbledon no tenga la autorización para dar puntos a los jugadores para el ranking mundial, con lo cual el campeonato perdería su categoría de Grand Slam, un estatus del cual sólo gozan otros tres torneos: Australia, Roland Garros (Francia) y US Open (Estados Unidos).
Los directivos de la ATP se reúnen estos días en Roma para determinar si habrá sanciones contra el All England Club, el sitio exclusivo y privado donde año con año se lleva a cabo Wimbledon, también conocido como el Abierto de Inglaterra.