El funcionario estadounidense reiteró la "poca probabilidad de la presencia" de Cuba, Venezuela y Nicaragua en la próxima Cumbre de las Américas, aunque aclaró que la decisión la tomará la Casa Blanca.
Nichols recordó que, si bien el secretario de Estado, Antony Blinken, declaró que la siguiente Cumbre podría ser la más inclusiva de la historia, también recordó que la "base en el hemisferio es la democracia".
"Tenemos la Carta Democrática de las Américas, la Carta de la OEA, las declaraciones de Quebec y Lima. Hay un sentimiento y una visión democrática en las Américas y vamos a respetar eso. Y, por lo tanto, no nos parece conveniente incluir a países que falten al respeto a la democracia", dijo Brian Nichols en entrevista con el diario español El País.
En días pasados, el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador amenazó con no asistir al encuentro regional diplomático en caso de que Washington no invite a Venezuela, Nicaragua o Cuba, país en el que estuvo de gira el 9 de mayo pasado e incluso se reunió con Raúl Castro.
"Nosotros estamos planteando que no se excluya a nadie, porque buscamos la unidad de toda América y sentimos que no debe de haber confrontación, que aún con las diferencias tenemos que dialogar y hermanarnos todos los americanos", comentó López Obrador durante la conferencia matutina del 10 de mayo.
El subsecretario de Estado de Estados Unidos para el Hemisferio Occidental informó que ya están en el proceso de reuniones del grupo de implementación para establecer los temas y compromisos políticos que se discutirán, tales como gobernanza democrática, salud y resistencia a las pandemias, transición energética limpia, futuro verde y transformación digital.
"También estamos enfocados en combatir la desinformación que corroe la democracia al socavar la confianza de los ciudadanos en el gobierno y los medios", declaró Nichols.
Hasta ahora, la Casa Blanca se ha limitado a señalar que no se han enviado las invitaciones, sin precisar si se está contemplando la participación de estos países.
En tanto, la exigencia de López Obrador ya fue respaldada por el presidente de Bolivia, Luis Arce, quien también advirtió que no participaría en la Cumbre si no se invitaba a los países mencionados.