Exembajador de EEUU: "No habría crisis si la OTAN no insistiera en su expansión"
22:51 GMT, 8 de marzo 2022
El exembajador estadounidense que participó en negociaciones que dieron término a la Guerra Fría señaló la responsabilidad de la OTAN en el conflicto en Ucrania, donde las intromisiones de EEUU "han sido profundas". El diplomático lleva décadas advirtiendo que la expansión de la Alianza Atlántica es injustificada.
Lea en SputnikJack F. Matlock Jr., que fue el embajador de EEUU en la URSS entre 1987 y 1991 y que participó directamente en las
negociaciones que pusieron fin a la Guerra Fría, señaló, en un artículo del 15 de febrero, que
la actual crisis entre EEUU y Rusia "era evitable, predecible y precipitada a propósito” pero que se podía “resolver aplicando el sentido común”.
En la nota, aparecida en la revista estadounidense sobre relaciones internacionales 'Responsible Statecraft' [Políticas Responsables], del Instituto Quincy —en honor al expresidente estadounidense John Quincy Adams (1825-1829)—, Matlock
destaca el rol de OTAN en el actual conflicto en Ucrania, a través de su amplia experiencia como embajador en la Unión Soviética y Checoslovaquia (1981-1983) y como Director de Asuntos Europeos y Soviéticos en el Consejo de Seguridad Nacional del expresidente Ronald Reagan (1981-1989).
En 1997, cuando el Comité de Relaciones Exteriores del Senado de EEUU
discutía la ampliación de la OTAN, Matlock fue invitado a declarar. En esa ocasión sostuvo que,
"la expansión de la OTAN fue el error estratégico más profundo cometido desde el final de la Guerra Fría".
Sus palabras textuales fueron:
"Considero equivocada la recomendación de la administración de admitir nuevos miembros en la OTAN en este momento. Si fuera aprobado por el Senado de los Estados Unidos, bien podría pasar a la historia como el error estratégico más profundo cometido desde el final de la Guerra Fría. Lejos de mejorar la seguridad de Estados Unidos, sus aliados y las naciones que deseen ingresar a la Alianza, bien podría alentar una cadena de eventos que podría producir la amenaza de seguridad más grave para esta nación desde el colapso de la Unión Soviética".
¿Cómo se llegó a este punto?
Según Matlock, "muchos observadores creyeron de manera errónea que Rusia extendería su poder sobre las exrepúblicas soviéticas" a partir de la disolución de la URSS en 1991, algo que, para él, estaba muy alejado de la realidad, visto desde un paradigma realista de las relaciones internacionales.
"Apoyamos la independencia de Estonia, Letonia y Lituania —algo refrendado por el parlamento soviético antes de su desintegración—, y a pesar de voces temerosas, Vladimir Putin nunca amenazó con reabsorber a las repúblicas del Báltico ni ninguna otra exrepública soviética, a pesar de que ha criticado la falta de derechos ciudadanos de rusos étnicos, un principio que la Unión Europea les ha pedido cumplir".
La mayor demanda del presidente ruso Vladimir Putin, según el exembajador,
es asegurar que la OTAN no acepte nuevos miembros,
en específico Ucrania y Georgia.
"Claramente no habría una crisis en la actualidad, si la OTAN no insistiera en su expansión desde el término de la Guerra Fría, o al menos, si hubieran construido una institucionalidad común en seguridad en Europa, incluyendo a Rusia", agregó el exembajador.
4 de marzo 2022, 08:33 GMT
Una crisis predecible
El exembajador advirtió al Comité de Relaciones Internacionales del Senado que el inicio de la ola expansionista de la OTAN a partir de 1997 fue una tremenda "torpeza".
"Nadie amenaza con re-dividir Europa, por lo tanto es un absurdo sostener la necesidad de admitir nuevos miembros en la OTAN, bajo la excusa de 'evitar la división de Europa'. La única lógica expansionista viable, es la inclusión de todos los países europeos, pero no es el espíritu de la OTAN", agregó Matlock.
Occidente perdió la oportunidad de tener un
"hogar europeo común", como sostuvo Mijaíl Gorbachov, secretario general del Partido Comunista de la Unión Soviética desde 1985 y luego su presidente (1990-1991),
durante su reunión con el expresidente de EEUU, George H.W. Bush (1989-1993), en 1989 en Malta.
"Obviamente que la incorporación de los países miembros del Pacto de Varsovia a la OTAN cuando EEUU prometió 'no mover una pulgada' de la alianza más allá de las fronteras de la Alemania reunificada fue un error de las administraciones estadounidenses hasta la actualidad", explicó.
El exembajador enfatizó que la Federación Rusa no fue bajo ningún motivo una amenaza para la seguridad europea, "menos después de respetar la independencia de los países de Europa del este".
El diplomático recordó que no solo fue la ampliación de la OTAN.
"Al mismo tiempo, Estados Unidos comenzó a retirarse de los tratados de control de armas que habían templado, por un tiempo, una carrera armamentista irracional y peligrosa que fueron los acuerdos fundamentales para poner fin a la Guerra Fría. La más significativa fue la decisión de retirarse del Tratado sobre Misiles Antibalísticos, que había sido el tratado fundamental de la serie de acuerdos que detuvieron por un tiempo la carrera de armamentos nucleares”.
Esto, a pesar de que despues de los atentados del 11 de septiembre de 2001, Putin fue el primer líder en ofrecer ayuda a EEUU ante una amenaza común como el terrorismo islámico. "Sin embargo, EEUU continuó ignorando a Rusia tras invadir Irak, algo a lo que Rusia —junto a Francia y Alemania—, se negó".
'Sentido común' para resolver la crisis
"Después de todo, lo que exige Putin es eminentemente razonable. No está exigiendo la desvinculación de un miembro de la OTAN ni amenazando a nadie. Si para los EEUU, su interés es mantener la paz, intentar desvincular la influencia rusa de Ucrania —agitando 'revoluciones de colores'— es una expectativa torpe y peligrosa, ¿no aprendimos nada de la Crisis de los Misiles en Cuba?", puntualizó el exembajador, refiriéndose a la grave crisis de 1962 que casi lleva a un enfrentamiento nuclear.
El diplomático apuntó que "en lo concerniente a Ucrania, las intromisiones estadounidenses han sido profundas, participando activamente en las manifestaciones y posterior Golpe de Estado de 2014".
Ahora bien, decir que aprobar las demandas de Putin es del interés objetivo de Estados Unidos no significa que vaya a ser fácil de hacer, lamentó. "Los líderes de los partidos demócrata y republicano han desarrollado una postura tan rusófoba que se necesitará una gran habilidad política para navegar en aguas políticas tan traicioneras y lograr un resultado racional", aseveró.
"Tal vez las negociaciones posteriores entre Washington y el Kremlin encuentren la manera de disipar las preocupaciones rusas y calmar la crisis. Y tal vez entonces el Congreso comience a lidiar con los crecientes problemas que tenemos en casa en lugar de empeorarlos", concluyó Matlock.
8 de marzo 2022, 01:26 GMT