Según informó la Policía Civil la mañana del 25 de febrero, hay al menos 217 fallecidos, de los cuales 203 ya fueron identificados, y además aún hay 34 personas desaparecidas.
La mayoría de los desaparecidos están bajo el barro y los escombros de barrios que sufrieron deslizamientos de tierra tras la riada del 15 de febrero.
Las tareas de búsqueda continúan con bomberos, militares y voluntarios, además del trabajo de 58 perros rastreadores.
Además, 13 escuelas públicas siguen abiertas para acoger a los vecinos que viven en áreas de riesgo; hasta el momento, 811 personas están durmiendo en estos puntos.