"Lo que está haciendo conmigo Casado es lo peor que se puede esperar de los políticos", ha dicho Ayuso durante una comparecencia ante los medios de comunicación. "Nunca imaginé que mi partido iba a actuar de un modo tan cruel contra mí", ha expresado asegurando que entiende que la oposición la ataque, pero que no es normal que esos ataques procedan de la dirección de su partido.
"No puede haber cosa más grave que acusar a alguien de la propia casa con responsabilidades de Gobierno sin pruebas de corrupción".
En esa comparecencia, en la que no ha aceptado preguntas de la prensa, Ayuso ha acusado directamente al presidente del Partido Popular, Pablo Casado, de encontrarse detrás de las informaciones sobre la presunta concesión de contratos de forma irregular en el Gobierno de Madrid.
En concreto, durante la noche del miércoles los diarios El Mundo y El Confidencial publicaron que la dirección nacional del Partido Popular investiga desde el mes de octubre si el Gobierno regional de Madrid pudo adjudicar irregularmente a un amigo del hermano de Ayuso un contrato para la compra de mascarillas por valor de 1,5 millones de euros.
Por su parte, el diario ABC publica el jueves 17 de febrero –citando a fuentes del Partido Popular– que los conservadores sospechan que el hermano de Ayuso se pudo llevar una comisión ilegal de 280.000 euros por mediar en ese contrato.
La presidenta de la Comunidad de Madrid ha reconocido que su hermano lleva trabajando en el sector comercial 26 años, mucho antes de que ella entrara en política, y asegura que ella no ha tenido nada que ver en que lograra su contrato. Y ha retado a la dirección general de su partido a probar que ha habido "un solo contrato irregular".
"Las informaciones que durante toda la mañana están publicando los medios de comunicación y que provienen del entorno de Pablo Casado, y que él no desmiente, son lo peor que se puede esperar de los políticos", afirmó Ayuso.
Las declaraciones de Ayuso llegan horas después de que el portavoz nacional del Partido Popular y alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, negara que desde una empresa municipal surgiera la iniciativa para espiar a su compañera de partido.