Los asuntos de interés bilateral también estuvieron sobre la mesa, pero el contexto global pesó más, considerando que la visita del mandatario brasileño se produce en medio de una tensión geopolítica que tienen en ascuas a las fronteras de Ucrania.
"Nuestros países abogan por un orden mundial multipolar basado en el derecho internacional y en el papel central de coordinación de las Naciones Unidas. Al mismo tiempo, estamos firmemente comprometidos con los principios del multilateralismo y la resolución política y diplomática de los conflictos", subrayó el presidente de Rusia en el encuentro.
La cumbre se realizó en momentos agitados para el Kremlin, pero justo cuando las nubes parecen lentamente disiparse. Un día antes, Moscú anunció que estaba retirando parte de sus tropas cerca de Ucrania y en Crimea, luego de que estas concluyeran sus ejercicios militares previstos.
La presencia militar rusa en esos lugares había generado preocupación de EEUU y de la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte) -o más bien, "paranoia", según Rusia-, pues la consideraban el preámbulo de una inminente "invasión" rusa a Ucrania, mientras Moscú lo negaba categóricamente y revindicaba su derecho a movilizar tropas en su territorio como lo creyera conveniente.
Bolsonaro, cuya administración ha venido realizado intensos acercamientos hacia la OTAN en los últimos años, fue tajante en su reconocimiento al líder ruso y en su respaldo a reducir las tensiones internacionales.
"Mi lectura es que Putin es una persona que busca la paz en cualquier conflicto; (un conflicto) no le interesa a nadie en el mundo", expresó a los medios, luego de una reunión de dos horas con su par ruso.
El líder brasileño también resaltó que "por coincidencia o no", durante su visita oficial Rusia anunció la retirada de tropas de la frontera con Ucrania, lo que se interpretó como un gesto de distensión.
"Brasil es un país pacifista, en el mundo varios países tienen sus problemas regionales; aquí existe un problema y nosotros somos solidarios con cualquier país desde que el camino para la búsqueda de la solución a esos impases sea pacífico", añadió Bolsonaro.
El presidente también resaltó que Brasil es "un país soberano" y reconoció que hubo presiones de otras naciones para que la visita oficial no se produjera, y que otros advirtieron que "podría ocurrir lo peor" durante la presencia de la delegación brasileña en Moscú.
Cooperación
En el ámbito bilateral, los mandatarios destacaron su interés en intensificar la cooperación en materia espacial.
"Los presidentes destacaron la cooperación en el campo espacial y la implementación de los proyectos conjuntos en materia de navegación por satélite y el seguimiento de desechos espaciales, y también reafirmaron su interés mutuo en fortalecer la cooperación en otras áreas relacionadas con las actividades espaciales con fines pacíficos", reza la declaración conjunta.
Bolsonaro y Putin subrayaron la necesidad de "utilizar el espacio ultraterrestre con fines pacíficos", e instaron a acciones conjuntas para "evitar una carrera armamentista en el espacio".
En otro orden de cosas, Bolsonaro agradeció a Putin su apoyo cuando Brasil sufrió fuertes críticas de la comunidad internacional por la deforestación de la Amazonía.
"Cuando algunos países cuestionaron la Amazonía como "patrimonio de la humanidad" agradezco su intervención, que siempre estuvo a nuestro lado en defensa de la soberanía", afirmó el presidente brasileño.
Los líderes también se comprometieron a "profundizar el diálogo" en sectores como el hidrógeno y la energía nuclear, y Bolsonaro hizo especial énfasis en el interés de su Gobierno en la construcción de pequeños reactores nucleares.
Se trata de la primera visita a Rusia de Bolsonaro desde que asumió como presidente en 2018. Su estadía en Moscú también tiene previsto un encuentro con empresarios de ambos países.