Estas temibles máquinas fueron empleadas por las unidades de las tropas reales de Arabia Saudí que, junto con los partidarios del presidente Abdo Rabu Mansur Hadi, emprendieron una ofensiva contra las fuerzas del movimiento rebelde hutíe Ansar Alá.
En el video compartido en las redes sociales se pueden ver las potentes explosiones de los proyectiles de 220 mm empleados por el sistema TOS-1A. Se trata de unos proyectiles termobáricos que, en esencia, se detonan al mezclarse con el oxígeno en el aire y llegan a formar una potente onda de presión y crean una especie de vacío. De hecho, por esta misma razón también se les llama armas de "presión y calor" o bombas de vacío.
Según algunos medios locales, en la ofensiva también fueron empleados los sistemas múltiples de lanzamiento de cohetes de 122 mm Grad.
La primera vez que se dio a conocer sobre la presencia de los TOS-1A Solntsepiok en la península arábiga fue en abril de 2019, cuando se publicaron fotos de tres de estas máquinas que estaban siendo transportadas. Más tarde se informó que fueron empleadas en combate.
En aquel entonces los expertos militares destacaron que estas máquinas se diferenciaban de las que usa el Ejército ruso por el hecho de tener un sistema de aire acondicionado, imprescindible en una región tan calurosa.
Actualmente, estos lanzallamas pesados están en servicio en los ejércitos de siete países, además de Rusia. Algunos de estos países ya emplearon sus TOS-1A en combate, como fue el caso de Irak y Siria.
Las máquinas usadas por Arabia Saudí cuentan con el chasis del tanque T-90S. Pueden lanzar hasta 24 proyectiles sin recargar, con una distancia de tiro mínima de 400 metros y la máxima de 6.000 metros. Son propulsadas por un motor de 1.000 caballos que es capaz de funcionar con distintos tipos de combustible y aceleran a estas máquinas hasta los 65 km/h por carretera. Tienen una autonomía de hasta 550 kilómetros y su tripulación consta de tres personas.
Desde enero el movimiento Ansar Alá ha llevado a cabo varios intentos de atacar con misiles el territorio de Emiratos Árabes Unidos en respuesta a su participación en las operaciones contra los hutíes en Yemen. Las fuerzas emiratíes, por su parte, afirman que interceptan los misiles disparados en su contra y destruyen las instalaciones de donde fueron lanzados.
Yemen vive desde 2014 un conflicto armado entre los partidarios del presidente, Abdo Rabu Mansur Hadi, y los rebeldes hutíes del movimiento Ansar Alá. En marzo de 2015 intervino en el conflicto, del lado del mandatario yemení, una coalición militar liderada por Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos.