"Gracias a Dios mi padre está bien; cada vez que pasa por eso es imposible no indignarse con la mentira de que Bolsonaro tiene discurso de odio, cuando en realidad él es la víctima del odio de un ex-militante del PSOL (Partido Socialismo y Libertad) y de los mal amados hipócritas que desean su muerte", criticó en Twitter.
Bolsonaro fue ingresado la madrugada del 3 de diciembre en el hospital Vila Nova Star de São Paulo por una obstrucción intestinal, una de las secuelas que le dejó la puñalada en el abdomen que recibió en septiembre de 2018, durante la campaña electoral.
El presidente fue apuñalado por Adélio Bispo, un hombre con problemas psiquiátricos que durante un tiempo había estado afiliado al izquierdista PSOL, un hecho que el presidente y sus hijos recuerdan cada vez que reaparecen los problemas de salud.