Entre los principales temas abordados por el líder norcoreano se encuentra también la posible respuesta a la invitación de la Administración Biden a las negociaciones para el desarme nuclear.
Según la agencia central de noticias coreana (KCNA), Kim Jong-un, al igual que otros altos funcionarios del partido, está dispuesto a "discutir y decidir sobre las políticas estratégicas y tácticas, así como las tareas de acción" para dar "el siguiente paso" en el desarrollo de la nación.
La reunión plenaria es uno de los órganos de toma de decisiones de más alto nivel en Corea del Norte. De momento, se desconoce cuánto se prolongará este encuentro ya que en años anteriores duró varios días.
Se espera que Kim Jong-un pronuncie el discurso de clausura en el que podría incluir mensajes significativos sobre la posición de Pyongyang respecto a la desnuclearización. En años anteriores el líder ha aprovechado esta oportunidad para expresar su disposición a negociar con Corea del Sur y aceptar una reunión con el expresidente de EEUU, Donald Trump.
En junio, Kim Jong-un dijo que su país debe estar listo para "tanto el diálogo como para la confrontación" con EEUU. Cinco meses después, Washington declaró estar dispuesto a estudiar diferentes iniciativas para lograr un diálogo con Pyongyang "sin ningún tipo de condiciones previas".
La Administración Biden ha dicho que quiere seguir un enfoque "paso a paso" para la desnuclearización de Corea del Norte, particularmente a raíz de las conversaciones de 2019, que fueron retomadas por el expresidente Donald Trump pero luego fracasaron.