"Hay una probabilidad del 90% de que persistan las condiciones de La Niña entre diciembre de 2021 y febrero de 2022", recoge el comunicado.
Los expertos de la organización remarcan a la vez que a pesar del efecto de enfriamiento del fenómeno, "se espera que las temperaras en muchas partes del mundo sean superiores al promedio debido al calor acumulado y atrapado en la atmósfera resultante de niveles récord de gases de efecto invernadero".
La Niña "es un alivio de corta duración y no revierte la tendencia al calentamiento ni reduce la urgencia de acciones climáticas", afirmó el secretario general de la OMM, Petteri Taalas, citado en el texto.
Por tanto, la OMM predice un invierno (boreal) "inusualmente caluroso" en el norte y el noreste de Asia y en el Ártico. Además, entre diciembre y febrero se pronostican temperaturas superiores al promedio en el este y sureste de América del Norte, incluida una gran parte del Caribe, así como en Europa.
Las cifras normales o inferiores al promedio podrán registrarse en ese periodo en el norte y en el este de América del Sur. En cuanto a las precipitaciones, humedad de intensidad anómala también podría generarse en estas zonas, según la OMM.