"Los científicos sudafricanos forman parte del equipo de la OMS y colaboran con muchos colegas de diferentes países (...). Sudáfrica tiene la suerte de tener uno de los mejores programas de vigilancia molecular del mundo llamado NGS-SA", dijo Kariem.
El médico añadió que Sudáfrica quiere seguir avanzando y necesita financiación para continuar con el trabajo.
El 26 de noviembre, la OMS calificó de "preocupante" la nueva variante ómicron detectada en Sudáfrica, debido a un gran número de mutaciones que apuntan a un mayor riesgo de reinfección en comparación con otras variantes de preocupación.
Según los expertos del organismo, el riesgo de reinfección con esta variante es más alto en comparación con otras variantes de preocupación, como la delta.
Numerosos países ya suspendieron o restringieron los vuelos con naciones africanas para evitar la propagación de ómicron por el mundo.