"Nuestro objetivo es garantizar la estabilidad y la seguridad", dijo en un discurso transmitido por Sky News después de la reunión del Comité de Seguridad Nacional de Australia.
El primer ministro destacó que "23 oficiales de la Policía Federal de Australia serán desplegados inmediatamente", mientras 50 oficiales más, junto con 43 militares de la Fuerza de Defensa australiana arribarán a la isla el viernes.
Subrayó que el Gobierno australiano no tiene la intención de "intervenir en asuntos internos" de la isla, sino quiere asistir en el marco de la solicitud del Gobierno de las islas bajo el acuerdo bilateral de seguridad de 2017 con Australia.
Indicó que la presencia de las fuerzas australianas durará "unas semanas".
Morrison destacó que Australia seguirá de cerca la situación.
El 24 de noviembre los medios locales informaron que los manifestantes en la capital de las islas Solomón, Honiara, volvieron a salir a las calles infringiendo el confinamiento declarado por las autoridades, intentaron prender fuego a una comisaría de policía, encendieron una escuela y robaron en tiendas.
La policía usó gas lacrimógeno y balas de goma para dispersar a la multitud.
Los disturbios en la capital de las islas, Honiara, fueron causados por discrepancias entre las autoridades de la isla Malaita y el Gobierno central, puesto que el primer ministro Sogavare optó por desarrollar relaciones con China, mientras el primer ministro de la isla Malaita, Daniel Suidani, considera necesario mantener relaciones con Taiwán y rechaza la ayuda de Pekín a su provincia.
Además, la población de Malaita protesta contra la falta de medidas de desarrollo de la región, acusando a las autoridades de no tomar en cuenta la opinión de la población.