"La visita ilegal de un exministro de Defensa armenio al territorio azerbaiyano controlado provisionalmente por las fuerzas rusas de paz, la concentración de unos 60 militares armenios en una carretera que conduce a las posiciones del Ejército azerbaiyano en Lachín y el intenso bombardeo de las posiciones azerbaiyanas, muestra que Armenia fomenta las tensiones y no tiene interés de restablecer la paz en la región y delimitar las fronteras con Azerbaiyán", señala la declaración.
Bakú comenta que las tensiones en la región constituyen otra provocación política y militar de Armenia, y afirma que la responsabilidad por el deterioro de la situación recae sobre la cúpula político-militar de ese país.
Más temprano el 16 de noviembre, el Ministerio de Exteriores de Armenia informó que las fuerzas armadas de Azerbaiyán lanzaron un ataque en el este de la frontera armenia e invadieron el territorio del país, provocando víctimas.
Según el Ministerio de Defensa armenio, la cifra de muertos y heridos se está precisando.
A su vez, el Ministerio de Defensa de Azerbaiyán informó que la situación en la frontera con Armenia se mantiene tensa y los enfrentamientos continúan. Bakú, en su versión, destruyó medios antitanque y morteros del ejército de Ereván en respuesta a ciertas provocaciones del lado armenio.
Las hostilidades en Nagorno Karabaj, que volvieron a estallar a fines de septiembre de 2020 y provocaron miles de muertos durante un mes y medio de combates, cesaron el 10 de noviembre de 2020 en virtud de una declaración adoptada por los líderes de Armenia, Azerbaiyán y Rusia.
9 de noviembre 2021, 10:30 GMT
Por acuerdo entre las partes, Rusia envió fuerzas de paz a la zona del conflicto, por cinco años en un principio. El contingente, de unos 2.000 efectivos, se desplegó paralelamente a la retirada de fuerzas armenias desde los distritos azerbaiyanos de Agdam, Kelbecer (Kalbajar) y Lachín, ocupados durante la guerra de 1992-1994.
Conforme a la declaración tripartita, los bandos en conflicto han de permanecer en sus posiciones actuales, realizar un intercambio de prisioneros de guerra, otros detenidos y cuerpos de los caídos.