El suicidio siempre ha sido una palabra tabú en la agenda de temas de los medios de comunicación. Todo, con el fin de evitar el denominado efecto llamada, es decir, para impedir que más personas se suiciden al ver o leer una noticia relacionada con este asunto.
Sin embargo, la actualidad manda y toca contar la realidad, sin filtros, ya que el suicidio se ha convertido en la primera causa de muerte externa en España. Según un comunicado publicado por el Instituto Nacional de Estadística (INE) con fecha a 10 de noviembre, el año 2020 se cierra con 3.941 suicidios, una cifra jamás alcanzada desde que hay registros, es decir, desde 1906.
No es baladí que 2020 haya generado tantas automuertes: la pandemia, las dificultades económicas derivadas de la crisis sanitaria, duelos y pérdidas de familiares, violencia doméstica... Todo ello ha propiciado que las personas hayan tenido que aceptar vivir en soledad atrapados entre una vorágine de problemas, lo que ha llevado a muchos a quitarse la vida.
De hecho, el suicidio fue la principal causa de muerte entre los hombres (2.930 fallecidos) y la tercera causa entre las mujeres (1.011), aunque son ellas las que lo intentan más veces que los varones. En los jóvenes de 15 a 29 años, el suicidio es la principal causa de muerte después de los tumores. En total, se estima que ha habido 11 suicidios al día y un suicidio aproximadamente cada dos horas.
Por comunidades autónomas, mientras que han aumentado significativamente en el País Vasco (un 30%), Cantabria y Andalucía, han descendido en Aragón y, sobre todo, Illes Balears, con una disminución de más del 10%. Desde el Observatorio del Suicidio en España de la Fundación Española para la Prevención del Suicidio se esperaba para 2020 una disminución significativa de los suicidios, después de observar la disminución generalizada de muertes externas a raíz del confinamiento. Sin embargo, tal y como apuntan desde el propio organismo, parece que después del confinamiento se ha producido un "efecto rebote".
A las cifras existentes habría que sumarle los intentos de suicidio que, según cálculos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), podrían ser alrededor de 20 intentos por cada suicidio. Se estima que en un año, podrían producirse en torno a 80.000 intentos de suicidio al año en España y que entre dos y cuatro millones de personas pueden tener intenciones suicidas a lo largo de su vida. Desde el Observatorio del Suicidio recuerdan la necesidad de crear una estrategia estatal para la prevención de estas muertes. Por su parte, el presidente del Gobierno ha anunciado recientemente que creará un plan de salud mental dotado con 100 millones y un teléfono 24 horas para prevenir el suicidio.