En un comunicado, la Guardia Civil Metropolitana informó que sólo realizó "un disparo de bala de goma para dispersar a los manifestantes alterados que intentaron saltar la valla y tiraron piedras contra el edificio del ayuntamiento".
Los manifestantes lanzaron huevos, botellas y mástiles de banderas contra el edificio, y un agente llegó a ser alcanzado por una piedra en el casco, pero no resultó herido.
Según los manifestantes, una mujer se fracturó la pierna tras los disparos realizados por la Policía Militar y la Guardia Civil Metropolitana.
Durante la protesta se quemaron sacos de basura y el comercio local cerró sus puertas por precaución.