"Todo estaba tranquilo, pero lastimosamente gente que al parecer responde al Comité Cívico ha iniciado acciones violentas contra la población", dijo el coronel de policía Eric Holguín a la red de televisión Bolivisión, mientras encabezaba una operación masiva de fuerzas antidisturbios para reponer el orden.
Santa Cruz, cuyo Comité Cívico lideró la movilización opositora, fue la región más afectada por el paro parcial, que transcurrió en tensión a causa las presiones de grupos a favor y en contra de la protesta que demandaba el fin de la "persecución política" y el retiro de un proyecto de ley contra ganancias ilícitas.
Holguín dijo que los supuestos activistas cívicos cruceños atacaron a un grupo de vecinos que había tomado una rotonda en un barrio popular, en aparente rechazo al paro.
Redes de televisión dijeron que los cívicos obligaron a bajar la bandera indígena wiphala que los vecinos habían izado en el lugar, produciéndose peleas que obligaron a la intervención policial con gases lacrimógenos y otros materiales antidisturbios.
"Solo estamos restableciendo el orden público", aseguró el jefe policial.
Los medios reportaron que la policía detuvo a varios manifestantes, pero no había informes oficiales inmediatos sobre esta acción.
Otros hechos menores de violencia se reportaron en las ciudades de La Paz y Cochabamba (centro), donde la policía y manifestantes oficialistas impidieron que grupos opositores bloqueen algunas calles.