"Esperamos un trabajo conjunto constructivo para buscar puntos en común a fin de acercar nuestras posiciones y basándose en los intereses mutuos", destacó Ermakov en el documento presentado en la sesión de la Primera Comisión de la Asamblea General de la ONU por un representante de la delegación rusa.
Indicó que que los presidentes de Rusia y EEUU iniciaron un amplio diálogo sobre la estabilidad estratégica que tiene por objetivo sentar las bases para un futuro control de armas.
En su opinión, la atmósfera de la recientes reuniones suscita motivos para un cauto optimismo.
Además, la Cancillería rusa destacó un enfoque pragmático de la nueva administración estadounidense en las consultas sobre la estabilidad estratégica, al recordar que Moscú y Washington lograron prorrogar por cinco años al Tratado de Reducción de Armas Estratégicas (START III, por sus siglas en inglés).
Las partes también reafirmaron su compromiso con el postulado sobre la inadmisibilidad de una guerra nuclear en la cumbre bilateral del 16 de junio en Ginebra, Suiza.
A su vez, Ermakov subrayó que "Rusia es plenamente consciente de su responsabilidad de mantener la estabilidad global y regional e implementa una política destinada a la preservación de la paz", ofreciendo medidas políticas y diplomáticas concretas para mantener y fortalecer el control de armas.