El 31 de agosto, el Atlántico estaba repleto de ballenas. Analía Georgetti se disponía a festejar su cumpleaños en el mar, junto con una amiga, con quien quedó en reunirse en las costas de Puerto Madryn, una ciudad de la provincia patagónica de Chubut, al sur de Argentina.
A pesar de la presencia de la fauna marina, las mujeres se metieron al mar a disfrutar de la inmensidad y la belleza del Atlántico que se ofrecía ante sus ojos.
Ya en su tabla, Analía pudo divisar que debajo de ella una ballena daba vueltas. Llegó a hacer contacto visual con ella, pero no sintió miedo. Se limitó a guardar el remo para no asustarla o hacerla sentir amenazada, dijo al diario Clarín.
Atraído por la claridad del mar, la baja marea y la cantidad de avistamientos de ballenas, el fotógrafo Maxi Jonás, quien es colaborador de la agencia Télam y fotógrafo de la Legislatura provincial, también se interesó en visitar las costas de Madryn, no sin antes pedirle prestado a un colega un dron para hacer algunas tomas.
Desde la percepción de Analía, el ejemplar solo nadaba, pero no solo pasó por debajo de la tabla, sino que le dió pequeños empujoncitos como jugueteando con ella.
Por obra del destino o mera casualidad, el maravilloso momento fue capturado por Jonás, quien publicó el video en sus redes y le hizo llegar un gran obsequio de cumpleaños a una completa desconocida.
Hizo falta un lente, guiado por un ojo experimentado, la reacción respetuosa y paciente de Analía, que se quedó inmóvil tras percatarse de la presencia de una ballena que nadaba a su alrededor, y el accionar curioso y divertido del ejemplar para hacer viral un momento único.