"El déficit de precipitaciones, la menor acumulación de nieve y el menor acceso al agua, nos han promovido este anuncio que nos permitirá poder contar con recursos para ir en ayuda de los agricultores medianos y pequeños", señaló la titular de la cartera mediante una transmisión en vivo en la cuenta oficial de Twitter del ministerio.
Para paliar la sequía, el Gobierno dispuso un fondo de emergencia de 8.000 millones de pesos chilenos (un estimado de 10 millones de dólares) y así aliviar al sector de la agricultura de porte familiar y mediano.
La ministra subrayó la importancia de esta medida, sobre todo porque permite acelerar las acciones para traer alivio a las zonas afectadas.
"Declarar emergencia agrícola implica una agilidad en la ejecución de los recursos. Este fondo de 8.000 millones se va a poner a disposición de todas las regiones que lo requieran, a través de los gobiernos regionales y las autoridades locales para ver, en cada uno de los casos, cuál es la mejor medida a tomar en cada productor y ver la mejor forma de atender cada una de esas necesidades", señaló.
Asimismo, la secretaria de Estado enfatizó: "La situación de sequía no solo es una emergencia, tenemos que trabajar en ella pero este sin duda es un trabajo estructural, y como país no solo tenemos que contar con recursos para las medidas inmediatas, sino para medidas de mediano y largo plazo; estas principalmente son medidas relacionadas al mejor uso del agua".
La zona central de Chile vive una de las sequías mas extensas desde que hay registros, agravada en los últimos años por el fenómeno de La Niña e impactando negativamente en las actividades productivas y en el suministro de agua potable y electricidad a la población.